13/10: UN DÍA PARA CELEBRAR

Sábado de 1998, mes de junio, un joven de 12 años esperaba ansioso ver algo en la televisión esa noche. Una película, un programa de entretenimiento; no, había otra cosa que le llamó la atención durante la semana, un tanto atrevido pero llamativo, algo que le interesó desde el primer momento que vio el comercial y que no dejaba de contar las horas para comenzar a verlo. Ocho en punto de la noche, inicia el espacio especial dedicado al animé: “Japanimotion”, por Locomotion; si, era “Agent AIKa”, y hasta las 10 de la noche fue feliz el joven. 

Primer opening de Agent AIKa

Esa corta aventura fue mi primera experiencia con el ecchi, el inicio por el gusto hacía dicho género de animación japonesa, y el motivo por el que escribo estas líneas. “Agent AIKa” fue la razón por el cual me concentré en buscar entregas con la misma tónica erótica, atractiva y cómica. Me había convertido en un amante “pervertido” (no de la manera que creen, comillas, comillas).

Ya maduro, al borde de los 30 años, y con mayor experiencia, he visto una gran variedad de títulos ecchi, desde los más antiguos hasta los modernos; los que mostraban poco hasta los que abusan; los que satisfacen al público hasta los que te dejan con las ganas; toda una variedad de erotismo desbordante. Traseros, calzones, pechos… todo eso lo distingo al ver cada serie, pero hay algo que me inquieta, y tal vez a muchos, ¿cómo comenzó todo? 

¿Cómo se inicio este género? Me persigue la duda. Desde este punto no vendré a contante lo que es, nada de ese rollo barato: “se originó con la letra H del Hentai y bla, bla, bla… pechos”, basta, ya he leído y escuchado tanto esa explicación que aburre totalmente, prefiero torturarme con “Boku no Pico” a volver a saber de esas palabras recurrentes. No, aquí te explicaré de otra manera, algo rápido y entendible [Sarcasmo] (“la letra H”… basura) [/Sarcasmo].

Desde ya, el ecchi no tiene una fecha clara de existencia, es más no se logra conocer con exactitud cuál fue su primera entrega animada. Se presume, que su origen data desde 1973, más específico un 13 de octubre, con el estreno de una de los trabajos más conocidas del mítico Go Nagai, “Cutie Honey”. La trama era simple, una chica androide, de nombre Honey, que fue construida para ser hija de su creador, el profesor Kisaragi. A la muerte de éste, descubre que al pronunciar “Honey Flash” podía convertirse en lo que sea (hablo de disfrazarse, por si algún “degenerado” piensa otra cosa), incluso una heroína. Con ello, jura vengarse contra los asesinos de su padre. Nada del otro mundo, pelea y más pelea de chica mágica, hasta la transformación: completamente desnuda y mostrando los pechos (ni las siluetas de Sailor Moon, eso era cosa de niños).

 

Opening de la serie de 1973

Si hablamos de Go Nagai esto no es nuevo, porque sus trabajos han marcado varios aspectos que para la década de los 70 en Japón no se tocaba con facilidad: lesbianismo, violencia extrema, erotismo y homosexualidad. Para Nagai no había problemas, en los usaba en sus obras con una sonrisa tipo guasón. Esto originó la controversia en distintos sus títulos, pero con el tiempo reconocidos como una revolución en el manga y animé, ya que transformó todo sus conceptos posteriormente.

Tras la emisión del primer episodio de “Cutie Honey” en 1973, iniciaría una tendencia novedosa en la animación e ilustración manga, el supuesto nacimiento de un género nuevo, donde su característica más resaltante es sin duda el erotismo. Un 13 de octubre de ese año el ecchi nacería. Y después todo fue hermoso.

Han pasado 43 años desde la emisión de dicho primer episodio en la televisión japonesa, para mí 18 años. Y es que recordar esa época, donde a escondidas veía el erotismo mostrado en “Agent AIKa”, me hace reír, gozar de esa aventura visual, ya que era sorprendente descubrir un nuevo género, porque hay que admitir que ver dicha entrega era distinto a ver los desnudos de “Dragon Ball” o los topples de “Ranma 1/2”, otra cosa señores. 

Si tengo que agradecer algo, ese sería el día que mi amor por el ecchi nació, ese sábado en la noche, pero indirectamente mis saludos afectuosos a la obra de Go Nagai. Porque “Cutie Honey” es al ecchi como “Lolita” lo es al  Hentai, una vez en pantalla nada fue lo mismo. Y si me permiten decirlo, cada 13 de octubre es el “Día del Ecchi”, por eso me pondré cómodo, colocaré mi DVD de “Agent AIKa” en el reproductor y veré nuevamente las OVAs en homenaje a este gran día. Felicidades amantes del ecchi, y que el erotismo siga alegrando los días. 

El Charra